La carrera: ese mito urbano.
La elección de una profesión ha sido un gran tema a lo largo y ancho de mi vida: cuando era niña quería ser monja, pero al darme cuenta de que las monjas no podían ser madres desistí de ese propósito. Luego jugué a la mamá, pero interpreté el papel materno con tanta intensidad que me cansé de la responsabilidad de ser madre y no sabía cómo manejar el vínculo afectivo que mantenía con mi hijo plástico, así que desistí de ser madre. Quise ser médico, como mi padre. Quise ser comerciante, como mi abuela. Quise ser maestra, y abogado, y policía, y veterinaria, y cantante, y pianista, y Valentina Quintero, y astronauta y cualquier infinidad de cosas. Al final, terminé siendo periodista como mi mamá y medio sociólogo. Invertí demasiada atención en esto, no porque naciera con el chip de conciencia del rol que te otorga un título (o viceversa), sino que como a todos me enseñaron que esta es "la decisión más importante de la vida", así que para una persona que quiere y odia la misma cantidad de opciones con el mismo grado de intensidad como yo, era fácil sentirse seriamente agobiada por el asunto. Yo quería hacer de todo, bañarme en todos los charcos, pero sentía que se me iba a acabar la vida de la manera más incongruente posible.
Ya no estoy agobiada, ya estoy feliz con mis decisiones. Sin embargo, de tanto en tanto mi imaginación me pone en escenarios paralelos que decidí enumerar en una lista llamada "profesiones u oficios para alguna vez en la vida". Aquí está:
1. Cuidadora de pandas y elefantes.
2. Escritora de mis múltiples historias familiares especiales y cuentos varios.
3. Coach de gente en búsqueda de su humanización.
4. Coach de marketing sentimental.
5. Escritora de cartas de amor (sí, como Florentino Ariza).
Hi.. también me identifico un poco con este post es cierto que mucha veces no tenemos no la menor idea de que vamos a estudiar y nos dejamos influenciar ya sea porque tu padre es abogado y tu mama contadora o porque todos tus amigos estudian ING probablemente nunca es una decisión que tomamos totalmente.. Además siempre nos han enseñado que si no tienes una carrera tu vida será un fracaso cosa que no es cierto..
ResponderBorrarHi.. también me identifico un poco con este post es cierto que mucha veces no tenemos no la menor idea de que vamos a estudiar y nos dejamos influenciar ya sea porque tu padre es abogado y tu mama contadora o porque todos tus amigos estudian ING probablemente nunca es una decisión que tomamos totalmente.. Además siempre nos han enseñado que si no tienes una carrera tu vida será un fracaso cosa que no es cierto..
ResponderBorrarLas condiciones parecen estar dadas para que tomes la decisión mitad por miedo y mitad por vocación.
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